El cambio climático es la alteración de todos los parámetros
climáticos: temperaturas, precipitaciones, fenómenos climatológicos, etc.
Normalmente este tipo de cambios se producen a lo largo de varios siglos,
permitiendo a las especies animales y vegetales adaptarse gradualmente a las
nuevas condiciones climatológicas. Durante los últimos 2.000 años el clima ha
sido relativamente estable con un ligero enfriamiento de la tierra durante el
periodo comprendido entre 1500 y 1850.
Sin embargo, la Era Industrial ha supuesto a lo largo de los
últimos doscientos años, un grave impacto cultural, económico y climático.
Junto con la paulatina industrialización, se ha impuesto una cultura
consumista, que genera cada vez más productos desechables y que prioriza el
consumo barato frente al consumo responsable. Todo ello genera una emisión de
gases que se concentran en la atmósfera agravando el efecto invernadero,
contribuyendo a la subida de las temperaturas y al calentamiento global de la
tierra.
Gases que han contribuido al Cambio Climático:
Concentración de CO2 debido al uso de combustibles fósiles
para procesos industriales y medios de transporte.
Aumento de Metano (CH4) debido al tratamiento de aguas
residuales, al aumento masivo de crianza de rumiantes como alimento,
fertilizantes agrícolas, incineradoras de residuos, etc.
Elevación del nivel de óxido nitroso (N2O), también
utilizado en aerosoles.
Uso del PFC e Hidrocarburos (HFC).
Antes de la Revolución Industrial el nivel de CO2 en la
atmósfera era del 0.028%, actualmente la concentración de CO2 es de 0.075%.
No hay comentarios:
Publicar un comentario